Todos nosotros, de una manera u otra, sentimos que estamos comenzando a
vivir los tiempos del Apocalipsis. Todos sentimos la guerra. Cada día
hay más erupciones volcánicas, la polución generada por nuestra
tecnología se ha vuelto alarmante. Hemos debilitado la capa de Ozono
que nos protege de las radiaciones del Sol. Hemos contaminado el
planeta con nuestros desechos industriales y basuras.
La devastación de los recursos naturales esta acabando con las fuentes
de agua, con el aire que respiramos. El clima ha cambiado y las
temperaturas han aumentado de manera impresionante; los glaciares y
nevados se derriten, grandes inundaciones se suceden en todo el mundo.
Enormes tornados pusieron en peligro a Florida y gigantescos huracanes
devastaron a Centroamérica.
Nos amenaza el caos informático. La pobreza generalizada por los
efectos del caos económico se sienten en casi todos los países del
mundo. Todos buscamos respuestas y un camino seguro para los tiempos
que vivimos. Reconocemos, a partir de los problemas que enfrentamos a
diario, que no estamos viviendo en armonía.
Muchas religiones elaboraron profecías acerca de lo que esta pasando.
La Biblia anunció que cuando todos estos hechos sucedieran al mismo
tiempo estarían llegando los tiempos del Apocalipsis. Los mayas sabían
que esto iba a suceder exactamente en estos tiempos, por eso dejaron
unas guías para que cada uno de nosotros de manera individual
contribuya a llevar a la humanidad hacia "el AMANECER DE LA GALAXIA", a
una nueva Era en la que no habrá más caos ni destrucción.
Nos dejaron siete profecías en las que hablan de sus visiones del
futuro, de nuestro presente. Están basadas en las conclusiones de sus
estudios científicos y religiosos sobre el funcionamiento del Universo.
La primera profecía habla del final del miedo. Dice que nuestro mundo
de odio y materialismo terminará el SÁBADO 22 DE DICIEMBRE DE 2012, que
para ese día la humanidad deberá escoger entre desaparecer como especie
pensante que amenaza con destruir el planeta o evolucionar hacia la
integración armónica con todo el Universo, comprendiendo que todo esta
vivo y consciente, que somos parte de ese todo y que podemos existir en
una nueva Era de luz.
La primera profecía dice que a partir de 1999 nos quedan 13 años, sólo
13 años para realizar los cambios de conciencia y actitud de los que
nos hablan. Los mayas sabían que nuestro Sol, ellos lo llamaban
Kinich-Ahau, es un ser vivo que respira y que cada cierto tiempo se
sincroniza con el enorme organismo en el que existe. Al recibir un
chispazo de luz del centro de la galaxia brilla más intensamente,
produciendo en su superficie lo que nuestros científicos llaman
erupciones solares y cambios magnéticos. Ellos dicen que esto ocurre
cada 5.125 años; que la Tierra se ve afectada por los cambios en el Sol
mediante un desplazamiento de su eje de rotación. Predijeron que a
partir de este movimiento se producirían grandes cataclismos. Para los
mayas los procesos universales, como la respiración de la galaxia, son
cíclicos y nunca cambian. Lo que cambia es la conciencia del hombre que
pasa a través de ellos, siempre en un proceso hacia más perfección.
Basados en sus observaciones, los mayas predijeron que a partir de la
fecha inicial de su civilización, desde el 4 Ahau 8 Cumku, es decir,
desde el año 3113 a. C., 5.125 años en el futuro, o sea, el SÁBADO 22
DE DICIEMBRE DE 2012, el Sol, al recibir un fuerte rayo sincronizador
proveniente del centro de la galaxia, cambiará su polaridad y producirá
una gigantesca llamarada radiante. Para entonces la humanidad debe
estar preparada para atravesar la puerta que nos dejaron los mayas,
trasformando a la civilización actual basada en el miedo en una
vibración mucho más alta de armonía.
Solo de manera individual se puede atravesar la puerta que permite
evitar el gran cataclismo que sufrirá el planeta para dar comienzo a
una nueva Era, un Sexto Ciclo del Sol.
Los mayas aseguraban que su civilización era la quinta iluminada por el
Sol, Kinich-Ahau, el gran Quinto Ciclo Solar. Antes habían existido
sobre la tierra otras cuatro civilizaciones que fueron destruidas por
grandes desastres naturales. Creían que cada civilización es sólo un
peldaño en el ascenso de la conciencia colectiva de la humanidad.
Para los mayas, en el último cataclismo la civilización había sido
destruida por una gran inundación que dejó unos pocos sobrevivientes de
los cuales ellos eran sus descendientes.
Pensaban que al conocer el final de esos ciclos, muchos seres humanos
se preparaban para lo que verían y que gracias a eso habían logrado
conservar sobre el planeta a la especie pensante, el hombre. Nos dicen
que el cambio de los tiempos permite ascender un peldaño en la
evolución de la conciencia, dirigirnos hacia una nueva civilización que
manifestará mayor armonía y comprensión para todos los seres humanos.
El Tiempo del No-Tiempo 
La primera profecía nos habla del TIEMPO DEL NO-TIEMPO, un período de
20 años, llamado por ellos 1 Katún, los últimos 20 años de ese gran
ciclo solar de 5.125 años. Es decir, desde 1992 hasta el año 2012.
Profetizaron que durante ese tiempo, manchas del viento solar cada vez
más intensas aparecerían en el Sol. Desde 1992 la humanidad entraría en
un último período de grandes aprendizajes, de grandes cambios. Dijeron
que nuestra propia conducta de depredación y contaminación del planeta
contribuiría a que estos cambios ocurrieran. Cambios que van a suceder
para que comprendamos cómo funciona el Universo y avancemos hacia
niveles superiores, dejando atrás el materialismo y liberándonos del
sufrimiento.
La primera profecía anunció que 7 años después del comienzo del último
Katún, es decir, en 1999, comenzaría una época de oscuridad que nos
enfrentaría a todos con nuestra propia conducta. Mencionaron que las
palabras de sus sacerdotes serían escuchadas por todos nosotros como
una guía para despertar.
Los mayas profetizaron que el comienzo de esa época estaría marcado por
un eclipse de Sol que coincidió con una alineación planetaria sin
precedentes en la historia. Predijeron que ese eclipse ocurriría el
MIÉRCOLES 11 DE AGOSTO DE 1999. Ese año fue uno de los más movidos de
la historia de los últimos 5.125 años. A partir de esta fecha
comenzaron a correr los últimos 13 años. La última oportunidad para
nuestra civilización, los últimos momentos para realizar los cambios
que nos conduzcan al momento de la regeneración espiritual y a una
nueva Era Dorada Planetaria.
Para los mayas absolutamente todo es número, y el tiempo de los 13
números sagrados comenzó en AGOSTO DE 1999. Predijeron que, a partir de
ese eclipse, las fuerzas de la naturaleza actuarían como el catalizador
de una serie de cambios tan acelerados y de tal magnitud que el hombre
se vería impotente para contenerlos.
Al igual que los mayas, nuestros científicos contemporáneos aseguran
que el eclipse de AGOSTO DE 1999 fue muy especial. Ese día la Tierra
estuvo en su posición más cercana al Sol y la Luna en la posición más
lejana a la Tierra, por eso al interponerse en el camino del Sol no
alcanzó a taparlo completamente y sólo tapó su centro. Además, por la
noche de ese mismo día se produjo una lluvia de estrellas, también
llamada las Perseidas. Para terminar las "coincidencias"
,
prácticamente todos los planetas y el Sol se encontraron en posición
cruz cósmica con centro en la Tierra. Curiosamente en esa cruz cósmica
los signos del zodíaco ocupados por los planetas eran: Leo, el león;
Escorpio, el águila; Acuario, el hombre; y Tauro, el toro. Son los
símbolos de los 4 evangelistas, de los 4 custodios del trono que
protagonizan el Apocalipsis según San Juan.
Este eclipse es, por lo tanto, muy significativo. Para las antiguas
culturas los eclipses eran un símbolo de cambio en el orden natural de
las cosas. Además la sombra que proyectó la Luna sobre la Tierra al
eclipsar al Sol tuvo un recorrido bastante misterioso: atravesó Europa
pasando exactamente por los Balcanes, por Kosovo; luego pasó por Medio
Oriente, Irán e Irak, después se dirigió a Pakistán e India. Es decir,
la oscuridad pasó por todos los sitios de conflicto potencial en el
planeta.
Cosmología Maya 
La cultura, la ciencia, la religión y el arte maya están basados en su
relación con el Sol. Creían que sólo a través del Sol se podían
comunicar con Hunab-Kú, el Dios que esta en todas partes. Para los
mayas, Hunab-Kú es un organismo gigantesco que nos contiene a todos en
su interior. Afirman que su corazón y su mente están en el centro de
nuestra galaxia y que sólo a través del Sol se podían comunicar y
dirigirse espiritualmente a él. Por eso su interés fundamental en el
Sol, en Kinich-Ahau.
Los mayas construyeron sus maravillosas ciudades, sus sitios
ceremoniales y sus pirámides al sur de México, en la Península de
Yucatán, Honduras y Guatemala. Allí dejaron grabados en las piedras sus
mensajes del tiempo, los recorridos del Sol, de la Luna, de Venus y el
camino para que la humanidad se dirija hacia el crecimiento y la luz de
una nueva Era, no hacia el materialismo y la autodestrucció
n.
Maya viene de "Mayab", que significa "sitio del planeta Tierra llamado
Yucatán". Para los hindúes Maya significa ilusión, para ellos todo lo
que cambia es ilusión, lo que permanece, lo eterno, es el espíritu.
Maya también significa mente, magia, madre. Maya, Maia y María son una
misma palabra; curiosamente la madre de Buda se llamaba Maia y la madre
de Jesús, María.
Nuestro mes de Mayo lleva ese nombre en honor a la diosa romana Maya,
la diosa de la primavera, del florecimiento. En filosofía esotérica, la
palabra Maya representa a una mente que se libera del cuerpo para
moverse a grandes distancias con plena conciencia.
¿Tendrá este último significado algo que ver con la desaparición de
casi todo el pueblo maya en el año 830 d. C.? Aunque hay muchas teorías
sobre la desaparición misteriosa de esta gran civilización, algunos
dicen que desaparecieron de manera voluntaria y consciente, abandonaron
sus ciudades y sus casas en el momento de mayor desarrollo de su
civilización.
Los mayas descubrieron, gracias a sus estudios sobre el Sol, que el
Sistema Solar entero se movía. Llegaron a la conclusión de que el
Universo tiene ciclos, períodos de tiempo repetitivos que comienzan y
terminan como el día y la noche. Se dan cuenta que nuestro Sistema
Solar se desplaza en una elipse que lo aleja y acerca al centro de la
galaxia. Es decir, que el Sol y todos los planetas se mueven en ciclos
en relación con Hunab-Kú, la luz central de la galaxia.
Encontraron que esa elipse, ese giro completo, ese ciclo que realiza el
Sistema Solar, dura 25.625 años. A este ciclo lo podemos llamar DIA
GALÁCTICO. Cuando el recorrido llega a la mitad, es decir, tras 12.800
años, estamos cerca del centro de la galaxia, de la luz, iluminados en
el día de la galaxia. En la otra mitad del recorrido, los otros 12.800
años, nuestro Sistema Solar esta cada vez más lejos de la luz central,
es decir, en la sombra, en la noche de la galaxia. Hay día y noche en
la galaxia, sucede lo mismo que en nuestro planeta pero en una escala
mucho mayor; cada día y cada noche duran 12.800 años.
Descubrieron que cada gran ciclo contiene, a su vez, ciclos menores que
tienen las mismas características que los ciclos mayores. El DIA
GALÁCTICO de 25.625 años está dividido en 5 ciclos de 5.125 años cada
uno. El primer ciclo es la MAÑANA GALÁCTICA, el segundo ciclo es el
MEDIODÍA GALÁCTICO, el tercero es la TARDE, luego viene el cuarto ciclo
la TARDE-NOCHE o ANOCHECER y por fin, la conclusión, el quinto ciclo,
la NOCHE GALÁCTICA que vuelve a dar paso a un nuevo amanecer, a otros 5
ciclos y así eternamente.
La primera profecía nos dice que en 1999 el Sistema Solar empezó a
salir del último de esos ciclos, que nos encontramos en el fin de la
noche, saliendo de la oscuridad y a punto de entrar en el amanecer de
la galaxia. Dice que al final y al comienzo de estos ciclos, o sea,
cada 5.125 años, el Sol central de la galaxia emite un rayo de luz muy
intenso. Mediante este brillo sincroniza a todos los planetas y soles.
Es como el latir lumínico del corazón de la galaxia, palpita cada 5.125
años.
Ese resplandor inmenso es el período de transición que marca el final
de un ciclo y el comienzo de otro, dura 20 años. Ahora nosotros nos
encontramos en el TIEMPO DEL NO-TIEMPO, es un momento evolutivo, una
etapa corta pero intensa dentro de los grandes ciclos donde suceden
cambios muy rápidos para impulsarnos hacia una nueva etapa de evolución
como individuos o como humanidad.
Los mayas nos hablan de un ritmo, de un orden que existe en el
Universo. El hombre maya es bastante poderoso: domina y posee el número
que le permite hacerse "dueño del tiempo". Su cuenta le permite saber
que todos los planetas tienen ciclos y giros invariables. Estamos en el
período del NO-TIEMPO y como individuos debemos tomar una decisión que
nos afectará a todos. Si continuamos en este curso negativo de odio de
los unos por los otros, de destrucción de la naturaleza, de miedo y
egoísmo, iremos directo a la destrucción, al caos y desapareceremos
como especie pensante del planeta. En cambio, si tomamos conciencia y
nos damos cuenta que todos formamos parte de un organismo gigantesco,
que debemos respetarnos los unos a los otros, que debemos sanar a la
madre tierra y ocuparnos de su limpieza, iremos directo al crecimiento
positivo. La naturaleza, nuestro Sol, la galaxia, están esperando
nuestra decisión... De nosotros depende el sentido que adoptará el
cambio de los tiempos, si ser á una etapa de dolor y destrucción o, por
el contrario, nos encontrará unidos en una misma conciencia positiva
dirigidos hacia el siguiente peldaño evolutivo.
La Quinta Civilización del Sol 
La historia de lo que se ha descubierto de los mayas comienza en el año
600 a. C.. En el monte Albán aparecieron unas enormes piedras talladas
con el primer registro del lenguaje de los mayas, los números. Figuras
danzantes fechadas con los números mayas: la concha en forma de boca
que representa el número 0, el punto que representa el número 1 y la
línea que representa el número 5.
Pero recién en el año 300 d. C. comienza realmente el desarrollo de lo
que podemos considerar maya. Seres que dedicaron su vida a estudiar y
registrar la galaxia.
Después de casi 600 años de intensa actividad constructora y de un
asombroso desarrollo científico, en el año 830 d. C., súbitamente,
desaparecen en forma misteriosa. Abandonan todo, dejan intactas sus
casas, sus ciudades y sus templos, que poco a poco son devorados por la
selva. Quedan algunos pocos custodios a cargo de lo abandonando,
supervisores de la herencia que nos dejaron.
Pasan aproximadamente 200 años desde el abandono, la mayoría de sus
ciudades desaparecen entre la selva y en ese momento algunas de ellas
son repobladas nuevamente. En el año 949 d. C., el rey tolteca conduce
a su pueblo hacia el sur, huyen de la invasión bárbara de los
chichimecas del norte que han destruido su capital, Tula. Los toltecas
ocupan nuevamente algunas de las ciudades mayas abandonadas y las hacen
renacer, pero nunca llegan a los mismos niveles de desarrollo. La época
maya-tolteca dura desde el año 1000 hasta el año 1350 d. C. cuando
comienzan a desaparecer lentamente.
En el siglo XVI, cuando llegan los conquistadores españoles la mayoría
de sus ciudades estaban cubiertas nuevamente por la selva y para el
siglo XVIII, lo poco que quedaba de ellos ya no existe.
De las investigaciones sobre las ruinas de sus ciudades, de los
estudios de las fechas y números tallados en sus muros, de su exacto
calendario, de sus códices y libros sagrados están reapareciendo sus
conocimientos y se está descifrando su misterioso mensaje de alerta y
esperanza.
Miles de sacerdotes, astrónomos y matemáticos mayas se dedicaron a
medir, registrar y estudiar durante siglos al Sol y a todas las
estrellas y planetas. Hace 1200 años fueron tan avanzados que
calcularon la distancia que recorre nuestro planeta anualmente
alrededor del Sol, tuvieron tanta precisión que hoy la NASA sólo tiene
segundos de diferencia con las medidas que obtuvieron los mayas.
Calcularon que la Tierra daba la vuelta al Sol en 365.242010 días. Hoy,
el año de Greenwich es de 365.2422 días, una increíble diferencia de
sólo 17 segundos y 28 centésimas.
También los mayas calcularon el año del planeta Venus y lo
establecieron en 584 días. Hoy la NASA dice que la medida es 583.92
días por año, prácticamente lo mismo.
¿Cómo pudieron hacer estos cálculos tan exactos sin tener instrumentos
de precisión? Su ciencia astronómica estaba 1000 años más adelantada
que la de todos sus contemporáneos.
Encontraron los pulsos que recibe cíclicamente el Sistema Solar del
centro de la galaxia. Construyeron ciudades como Tulum, rodeadas por
murallas; no para su defensa sino para usarlas como punto de referencia
de la aparición del Sol y los planetas.
En matemáticas eran muchísimo más avanzados. Su sistema aritmético era
vigesimal, es decir, contaban de 20 en 20. Un sistema con base en el
número 2, lo que lo convierte en un sistema binario exponencial, un
sistema matemático armónico con el Universo, el mismo que utiliza la
naturaleza para la división de las células.
También utilizan los números de manera simbólica, convirtiéndolos en
entidades mágicas, seres armoniosos que cuentan una historia, como el
I-Ching. Tenían el calendario más exacto hecho por cualquier
civilización antigua sobre la tierra. Éste estaba compuesto por 13
meses de 28 días cada uno y un día a parte al final del calendario para
recibir el nuevo año (28x13=364+1=
365 días). Un calendario que sirve para sincronizar el ciclo de la Tierra, la Luna y el Sol con el Universo.
Los mayas también fueron muy avanzados en su manera de cultivar la
tierra y cosechar los alimentos para todo su pueblo. Construyeron redes
de canales de riego para mantener irrigada la tierra.
Su arte era absolutamente bello. Los bajorrelieves y las esculturas en
piedra tienen una elegancia clásica. Las delicadas figuras de cerámica
de sus soberanos, sacerdotes, artesanos y de todo el mundo funcionaban
como las fotos de la época. Son unos de los documentos más importantes
para entender su vida, sus costumbres y poder llegar hasta su mente y
corazón.
Es impresionante la cantidad de ciudades y monumentos que construyeron.
Vivían como los griegos, en ciudades-estado. Las pirámides eran torres
para las divinidades, escaleras al cielo que suben a los templos que
dedicaban a las esencias de todas las cosas.
Eran tan avanzados que utilizaron la producción en serie. Todos los
elementos repetitivos de sus palacios eran diseñados mediante la
utilización de moldes y luego se producían de manera industrial para
ensamblarlos con increíble precisión.
Con bajorrelieves tallados en piedra, enormes esculturas y pinturas
murales adornaban sus palacios. Colocaban estelas, que son grandes
piedras talladas donde se contaba la vida de su soberano, en sus plazas
y caminos. En los muros de sus palacios narraban los acontecimientos
colectivos. Utilizaban los techos y pisos de sus plazas para recoger el
agua y canalizarla hacia enormes depósitos.

Mientras construyeron sus pirámides y observatorios encontraron una
manera de conocer el Universo, inventaron su sistema para registrar los
procesos naturales, lo estudiaron, lo organizaron, lo consolidaron y lo
dejaron escrito en la piedra como un monumento a la sabiduría.
Construyeron con una tecnología que se perdió en el tiempo, al igual
que el misterio de su desaparición.
La mayor parte del pueblo maya desapareció sin dejar ningún rastro,
súbitamente. Abandonaron sus casas, sus templos y sus ciudades como si
el tiempo se hubiera detenido en ese instante. Sólo a través de su
herencia, de lo que hemos encontrado sobre su vida diaria, de sus
muestras evidentes de sabiduría podremos establecer porqué y cómo lo
hicieron. Son muchas las preguntas que todo esto nos genera ¿Será que
aprendieron a usar la mente más allá del 10% de la que nosotros la
utilizamos? ¿Obtuvieron niveles altísimos de energía vital después de
largos procesos de purificación? ¿Será que utilizaron mantras, palabras
sagradas repetidas rítmicamente en ceremonias místicas, para producir
estados alterados de conciencia colectiva? ¿Adónde se fueron sus
sacerdotes, sus astrónomos y sus matemáticos? ¿Pudieron abrir una
puerta a otro espacio u a otro tiempo, a otra dimensión de realidad,
tal vez paralela a la nuestra pero más elevada? Sabemos que muchos
antiguos profetas, como dice en la Biblia a, al abrir esa puerta se
convirtieron en una brillantísima esfera de luz y abandonaron
conscientemente este mundo.
Ahora, ¿qué ciclo fatal descubrieron a través del Sol? ¿Qué ciclo fatal
descubrieron a través de los números? ¿Por qué interrumpen su
calendario precisamente en nuestra época? ¿Será que quieren llamar
nuestra atención hacia estas fechas? A partir de 1999 empezaron a
correr los últimos 13 años, el tiempo exacto para que cambiemos y nos
impulsemos juntos hacia una nueva era de paz y de armonía.
Las 7 Profecías Mayas 
Develar las predicciones de los mayas implica sumergirse en su mundo
científico, religioso y espiritual. Aquí podrá conocer un poco más
sobre cada una de sus profecías:
- Primera profecía: Según esta profecía, el 22 DE DICIEMBRE DE 2012 el
Sol recibirá un rayo sincronizador del centro de la galaxia con el que
se iniciará un nuevo ciclo. Será el fin del mundo de materialismo y
destrucción en que vivimos y el inicio de una nueva etapa de respeto y
armonía. Antes de ese día, la humanidad deberá optar entre desaparecer
como especie pensante que atenta contra el planeta o evolucionar hacia
una nueva Era de integración con el resto del Universo.
- Segunda profecía: La segunda profecía anunció que, a partir del
eclipse del 11 DE AGOSTO DE 1999, las transformaciones físicas en el
Sol alterarían el comportamiento de los hombres. Dijeron que algunos
perderían el control de sus emociones y otros afianzarían su paz
interior para sincronizarse con los ritmos de la galaxia. Así podrán
neutralizarse los cambios drásticos que describen las siguientes
profecías.
- Tercera profecía: En la tercera profecía, los mayas aseguran que la
conducta antiecológica del hombre aumentará la temperatura de la Tierra
y producirá desequilibrios climáticos y geológicos. La falta de
sincronía entre nuestro comportamiento y la naturaleza traerá grandes
problemas como la evaporación del agua de los suelos, incendios
forestales y la destrucción de las cosechas. La actitud que tomemos
será crucial para sobrellevar esta época de crisis.
- Cuarta profecía: Aquí se predice una ola de calor que provocará el
derretimiento del hielo de los polos. Según los mayas, este será el
modo en que el planeta se limpiará y reverdecerá, pero a la vez se
inundarán las costas y miles de personas que viven cerca del mar se
enfrentarán a serios peligros.
- Quinta profecía: Según la quinta profecía, si no sintonizamos nuestro
comportamiento con los ritmos de la naturaleza y la galaxia, antes del
2012 veremos fallar todos los sistemas sobre los que está basada
nuestra civilización. Se producirá un colapso de la red informática, la
electricidad, el sistema económico y la religión. A partir de estos
hechos, el hombre verá la necesidad de reorganizar la sociedad de un
modo más armónico y menos competitivo.
- Sexta profecía: Habla de la aparición de un cometa que traerá
transformaciones físicas muy bruscas en nuestro planeta. A partir de
sus cálculos, los mayas aseguran que existen altas probabilidades de
que el cometa choque con la Tierra. Pero a la vez, sostienen que es
posible desviar su trayectoria por medios físicos o psíquicos.
- Séptima profecía: En la séptima profecía los mayas nos dejaron un
mensaje de esperanza. Dijeron que a partir de un esfuerzo voluntario
por lograr la armonía y la paz interior, podremos desarrollar nuevos
sentidos e integrarnos al funcionamiento de la galaxia. Así podremos
reducir los efectos nocivos anunciados por las otras profecías y
renacer en una nueva Era, "la Era de la Luz".
Reproducido de: Serie Documental "Las Siete Profecías Mayas" (TV Caracol)
From: Mecha
CONCIENCIA PLANETARIA
Espacio Web esotérico, libre e independiente.
Conocimiento oculto.
Bajate gratis todo el material desde la web:
http://www.ConcienciaPlanetaria.es
http://www.heliocentro.net
CD Nº7 de Giuseppe Vitulli GRATIS desde la sección "Audio - Video " de la Web de Conciencia Planetaria
9 VIDEOS de producción propia en la sección "Audio-Video" de la Web de Conciencia Planetaria
Los vídeos se pueden buscar y ver en Internet con www.youtube.
com,
y se pueden descargar al disco duro mediante el programa gratuito aTube
Catcher. Copia y pega la dirección URL del vídeo (la que aparece en el
navegador cuando lo estéis viendo). Puedes buscar aTube Catcher con
Google o descargarlo de cualquiera de los siguientes sitios:
1.
http://atube-catcher.uptodown.com/
2.
http://atube-catcher.softonic.com/
3.
http://losprogramasgratis.blogspot.com/2007/09/youtube-catcher-atube-catcher-descarga.html